La quita del grado inversor a Brasil pega sobre competitividad

11 de setiembre de 2015 La quita del grado inversor a Brasil pega sobre competitividad

Dos meses después de haberse calzado la banda presidencial, José Mujica lanzó una de las frases más recordadas de sus cinco años al frente del gobierno.

Uruguay debe "viajar en el estribo" de Brasil, dijo en mayo de 2010. A su lado, lo escuchaba el entonces también mandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, de visita en Uruguay. Era una época dorada para el gigante norteño, cuya historia de reconversión económica incluso le valió una icónica tapa en la revista británica The Economist con el título "Brazil takes off" (Brasil despega), donde se veía al Cristo Redentor eyectándose sobre el cielo carioca.

Pero de un tiempo a esta parte el país vecino vive momentos complicados que hacen temer por un aterrizaje forzoso. Su economía está en recesión, y acumula cinco trimestres consecutivos de caída en su Producto Interno Bruto (PIB), elevado déficit fiscal, desempleo en aumento e inflación alejada de la meta fijada por el gobierno de Dilma Rousseff.

El capítulo más reciente de esta historia se conoció el martes de esta semana, cuando una de las tres principales calificadoras de riesgo del mundo, Standard & Poor's le rebajó la nota crediticia del país a "BB+" desde "BBB-". Así, la deuda soberana brasileña perdió el grado de inversión y cayó a la categoría especulativa.

La novedad generó aun más preocupación en este lado de la frontera respecto a la situación de uno de los principales socios comerciales del país.

Como consecuencia de esto, advierten los analistas, Uruguay rezagará aun más competitividad frente al gigante regional. Esto hace más sinuoso el camino de los productos nacionales para ingresar a suelo brasileño. El nivel de competitividad promedio del país en los tres meses a agosto cayó 15,7% interanual frente a la principal economía latinoamericana –luego de ocho meses consecutivos de deterioro– y fue la mayor baja en más de dos años, según el Índice de Tipo de Cambio Real de El Observador (ITCR-EO).

Tipo de cambio e inflación

La depreciación del real pone presión para que el peso uruguayo siga su ejemplo. En lo que va de 2015 la divisa brasileña se devaluó 39,8%, mientras que el peso legó menos de la mitad de ese guarismo: 17,6%.

Para el Director del Centro de Economía, Sociedad y Empresa del IEEM, Ignacio Munyo, Uruguay seguirá "corriendo de atrás" a su vecino en esta área, y dijo que está "atado de manos" porque una devaluación agresiva dispararía una inflación ya lejos del rango meta establecido por el gobierno.

"La competitividad no mejora si la inflación responde tan fuerte al tipo de cambio", señaló Munyo.

El economista también apuntó cómo los nubarrones que se ciñen sobre Brasil pueden hacer llover también en Uruguay. "Pensar que la economía uruguaya va a crecer 2,5% en 2016 y 2,8% en 2017 con este escenario lo veíamos como muy optimista, ahora más", dijo.

Por su parte, el economista de CPA Ferrere Germán Deagosto también destacó cómo esta noticia "exacerba mucho más" el desafío de la competitividad para Uruguay.

Deagosto apuntó que, en un escenario internacional "cada vez más desfavorable", una depreciación más acelerada de la moneda tendría dos efectos principales. Por un lado, permitiría compensar el rezago que padece Uruguay, fruto de haber depreciado su moneda de manera menos violenta que otras economías. Además, permitiría "amortiguar" los impactos de este shock internacional sobre el empleo y la actividad.

"A la luz de lo que pasó en Brasil, parece que se consolida un escenario de mayor inflación" y un dólar más fuerte, sostuvo.

El ministro de Economía, Danilo Astori, dijo a Búsqueda que la quita del grado inversor de Brasil "tiene su lado positivo en la diferenciación de Uruguay con la región y especialmente" con el vecino, y recordó que el país posee la calificación de deuda de grado inversor de cinco agencias. Algo similiar dijo el número dos de la cartera, Pablo Ferreri.

De acuerdo a los consultados, es aún temprano para conocer si tanto la inversión extranjera directa (IED) como los grandes fondos de inversión girarán la cabeza hacia Uruguay dada la nueva situación que enfrenta Brasil. Pese a esto, parece difícil que haya un efecto derrame, agregaron.

Marcelo Sibille, gerente del área de asesoramiento económico y financiero en KPMG, dijo que si bien "desde un punto de vista estático" la pérdida del grado inversor de Brasil le da a Uruguay una "ventaja comparativa, pues sería considerado un refugio más seguro para las inversiones financieras", no es lo más probable.

"Es más factible que el comportamiento de los mercados financieros nos arrastre y terminemos verificando un mayor riesgo país con presiones adicionales al alza en el tipo de cambio", añadió.

Según Deagosto, en tanto, resta saber si el mercado "distingue" a Brasil de Uruguay. Lo que sí es seguro, dijo, es que este hecho introduce mayor volatilidad en el ámbito internacional. "Esto asusta a los inversores y los capitales se repliegan a activos más seguros", agregó.

Fuente: http://www.elobservador.com.uy/la-quita-del-grado-inversor-brasil-pega-competitividad-n676383